Ruinas de Santa Clara

Riqueza en detalles de la fachada del templo, dentro del complejo. Se encuentra a tres cuadras y media del Parque Central, justo detrás del Parque y Tanque La Unión. Fue la sede de la Orden de las Clarisas.

El exterior es un muro decorado que junto con su entrada principal pueden pasar desapercibidos, pero dentro alberga una hermosa construcción que debe incluirse en la visita a La Antigua Guatemala.

La Iglesia

Es el primer detalle importante: su fachada se encuentra dentro, no hacia la calle, y por lo tanto es imposible de observar a menos que se ingrese al complejo.

La fachada de la iglesia es rica en detalles. Muestra el paso del tiempo y algunos daños causados por los terremotos pero sin duda son detalles que añaden belleza a su apariencia. Es en verdad hermosa. El interior muestra corredores con arcos de doble nivel rodeando al patio y fuente central. La jardinización es una imagen dulce y pacífica, demás decir agradable.

En general las áreas antiguas de la iglesia se encuentran despejadas para poder disfrutar el recorrido, excepto por una donde se exhiben los bloques caidos durante los terremotos.

Es sorprendente ver el tamaño de los bloques de la construcción que fueron derribados, así como las partes que formaban las cúpulas, sin duda da una clara idea del poder de los seísmos de la época.

Durante el recorrido de estas ruinas se permite visitar el interior subterráneo del complejo que cumplía entre diversas funciones, entre ellas espacios funerarios.

Un graderío lleva hasta las cámaras que sobreviven hasta la fecha en buen estado, es para muchos visitantes, el tramo más interesante.
Víctima de los terremotos

El Convento de Santa Clara se fundó en el año 1700. Para 1705 la construcción ya se encontraba habilitada y en funciones.

Ll estructura completa fue castigada por los terremotos de 1717, reconstruída y luego otra vez derribada durante los terremotos de 1773 para finalizar en ruinas por sismos de 1874.

A la fecha se puede visitar y disfrutar del interior de la construcción observando los detalles restantes, que son bastantes y hermosos, como los corredores con los arcos laterales, los graderíos, ventanas y techos arqueados.

Es uno de los complejos de mayor tamaño de La Antigua Guatemala.