Ruinas de Capuchinas

 

Convento-de-Capuchinas

 

La construcción de Capuchinas, llamada originalmente «Convento e Iglesia de Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza», fue aprobada por Felipe V en 1725 justo a la llegada de la Orden de Clarisas Capuchinas a la población.1 La obra fue iniciada en 1731 y consagrada el año de 1736 bajo la supervisión de Diego de Porres; de hecho, fue el último convento fundado de la urbe y el primero que abandonó el hábito de exigir dote para las nuevas internas, circunstancia que había impedido a jóvenes de escasos recursos acoger la vida religiosa.2

La rutina diaria de las profesas estaba regida por una estricta reglamentación que incluía las reglas máximas de pobreza, penitencia y ayuno; asimismo, debían subsistir de las limosnas proveídas por los fieles. Ahora bien, desde la formación de este convento, hubo dos tipos de monjas en los conventos de Santiago de los Caballeros

En 1943 comenzó la preservación oficial del convento, luego de que fuera declarado Monumento Nacional de Guatemala por el gobierno del general Jorge Ubico Castañeda, y hacia 1950 el Instituto de Antropología e Historia de Guatemala desarrolló trabajos de restauración. Desde 1972 la edificación alberga las oficinas del Consejo Nacional Para la Protección de La Antigua Guatemala. En la actualidad es de los sitios más visitados por el turismo nacional e internacional en esta ciudad

Breve historia de La Antigua Guatemala

arco-santa-catalina-228733

En 1524 el Capitán Don Pedro de Alvarado había ya conquistado varias provincias y continuando dicha tarea alcanzó el territorio que los mexicanos denominaban Almolonga, que significa �manantial de agua�.

Dicho lugar sorprendió a los españoles por su belleza y decidieron establecerse alrededor de 1524 bajo el nombre de Santiago de los Caballeros. Este valle contaba con la majestuosa vista del Volcán de Agua, un clima privilegiado, ríos de pacífico caudal que se encontraban a poca distancia, y hermosos paisajes.

La historia de la ciudad está marcada por tragedias seguidas que asediaron una tras otra a sus pobladores.

En 1538 un incendio dejó una huella imborrable que marcaría el inicio de una serie de tristes sucesos. En 1541 llega la noticia de la muerte de Pedro de Alvarado. Beatriz de la Cueva , su esposa, convertida en viuda llora constantemente la muerte de su esposo y por tales tristezas se le llamó � La Sin Ventura �. Tras corto tiempo solicita el puesto de Gobernadora de Guatemala, asumiendo ese mismo año dicha posición el 9 de septiembre. Pero irónicamente dos días después, el 11 de septiembre, una tremenda tormenta libera la furia del Volcán de Agua que inundó la ciudad con un torrente de lodo, donde entre sus tantas víctimas cobra la vida de la recién nombrada gobernante.

Fue fundada como ciudad en 1543, convirtiéndose en una de las más importantes del continente, pues se constituyó como la Capital del Reino, el cual comprendía Mesoamérica, lo que hoy es Chiapas y Soconusco (ahora en México), Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica.