Una de las tradiciones más emblemáticas de la Antigua Guatemala es la salida de muchas procesiones. Las diferentes parroquias, de este y algunos pueblos aledaños, sacan sus antiguas imágenes de Jesús crucificado y de la Virgen María sobre andas procesionales.
Éstas son cargadas por cientos de fieles, llamados cucuruchos, quienes visten de morado o negro, recorren las principales calles y avenidas con bandas musicales tocando melodías apropiadas para la época.
Los antigüeños acostumbran a diseñar y preparar alfombras sobre las calles frente a sus casas. Comúnmente las hacen a base de aserrín teñido de todos colores, mientras que otras son elaboradas con flores o frutas.
Si caminas por las calles empedradas de la ciudad, tendrás la oportunidad de ver muchas alfombras creativas y únicas que valen la pena ser fotografiadas.
El Viernes Santo es el día que más personas visitan la Antigua. En esa jornada pasan más de cinco procesiones. Aquellas que recorren la ciudad durante el día hacen referencia a Jesús cargando la cruz, mientras que las que pasan en la noche corresponden al Santo Entierro.
Unos momentos muy especiales que vale la pena vivir, tienen lugar en el Parque Central. Aquí, por la tarde, se hace una actuación de cómo fue el momento de la condena de Jesús. En la noche, el incienso envuelve el aire y cientos de candelas son entregadas a los presentes para que en silencio recuerden la muerte de Jesús.