TURI- LUCHAS

LUCHA LIBRE MEXICANA

Ahora puedes disfrutar de las Luchas Libre en el Turi-Luchas.

Los aguerridos luchadores son los superhéroes mexicanos; su identidad, oculta tras la máscara. El Turi-luchas te lleva hasta la mismísima puerta de la Arena México. Te reciben los luchadores, tomándose fotos con sus fans. Verás familias enteras enmascaradas, hombres y mujeres de todo tipo que acuden a las luchas como a un ritual. Bullicio y expectación en la entrada. Botanas, bebidas, máscaras, imanes, capas, playeras, silbatos y toda la parafernalia imaginable a la venta. Esta misma escena se repite cada semana en el Arena México.

Comienza el combate. La eterna lucha de técnicos contra rudos. Elige tu bando y únete a la fiesta. Ponte una máscara, compra bebidas, botanas y diviértete. Los luchadores salen en rondas. A veces uno contra uno; a veces tres contra tres o contra dos o contra uno. La lucha es encarnizada. Acrobacias aéreas, luchadores saltando del ring. El público está encendido, animando a sus ídolos. El ambiente es festivo, los comentarios que oyes son jocosos. La lucha libre es toda una tradición mexicana. Entrégate y vive la experiencia como uno más.

Se le conoce como lucha libre mexicana a la versión de la lucha libre profesional que se practica en México, caracterizada por su estilo de llaveo a ras de lona y aéreo.

Se evoca el término «mexicana» por las particularidades en la técnica luchística, acrobacias, reglas y folklore propio del país que le da una característica de autenticidad con respecto a lucha de los demás países. De ella surgen personajes míticos de la cultura popular, como El SantoBlue Demon o Mil Máscaras.

La lucha libre mexicana es una mezcla de deporte y secuencias teatrales que en México es el deporte-espectáculo más popular, sólo por debajo del fútbol. La lucha libre mexicana está caracterizada por sus estilos de sumisiones rápìdas y acrobacias elevadas, así como peligrosos saltos fuera del ring; gran parte de estos movimientos han sido adoptados fuera de México. Muchos de sus luchadores son enmascarados, es decir, utilizan una máscara para ocultar su identidad verdadera y crear una imagen que les dé una personalidad especial. Los luchadores pueden poner en juego su máscara al enfrentar un combate contra otro luchador enmascarado (máscara contra máscara) o bien con uno no enmascarado (máscara contra cabellera), pero al perderla no la pueden volver a portar nunca jamás en su carrera deportiva, aunque se han suscitado casos de luchadores que vuelven a enmascararse.

Cabe señalar que en el resto del mundo, fuera de Iberoamérica (sobre todo en los Estados Unidos y en Japón), al estilo de la lucha libre mexicana se le conoce por su nombre en castellano, lucha libre (sin importar el idioma). En México también se le conoce como pancracio, (que es el término utilizado en la Grecia clásica para denominar esta actividad) así como también el arte del catch.

Garibaldi… El Barrio Mágico de Ciudad de México

GARIBALDI

Descubre la magia de la música del mariachi acompañado de un buen trago de tequila o saboreando lo mejor de la cocina tradicional mexicana en este Barrio Mágico de CDMX.

Una de las plazas más emblemáticas de la ciudad. Su vocación se ha ido transformando con el paso de los años. Inicialmente fue un barrio prehispánico de Texcatzoncatl. Después de la Independencia de México fue conocida como la Plazuela de Jardín, donde se realizaban vendimias, y más tarde como la Plaza del Baratillo, hasta que en 1921 la nombraron Plaza Garibaldi, como parte de las celebraciones del centenario de la Independencia.

Actualmente es una de las plazas turísticas más concurridas, derivado de su ambiente festivo dedicado a la música mexicana, en especial para el mariachi. Diariamente cientos de personas se congregan para escuchar grandes interpretaciones, ya sea por un trío, un grupo de marimba o norteña. La plaza está rodeada de restaurantes y centros típicos, para disfrutar de veladas inolvidables con la familia, los amigos o la pareja.

El mariachi es una música tradicional y un elemento fundamental de la cultura mexicana; se distingue por una indumentaria regional, inspirada en el traje de charro. El principal instrumento utilizado es la guitarra y la voz; sin embargo, los mariachis más modernos se inspiran en el uso de trompetas, violines, vihuelas y guitarrones.

El repertorio de un mariachi está compuesto por jarabes, minués, polkas, valonas, chotis, valses, serenatas y corridos; así como canciones tradicionales de la vida rural.

El mariachi es tan abierto que ha adoptado otros géneros musicales como la ranchera, el bolero e incluso la cumbia colombiana. Las letras de las canciones interpretadas se refieren al amor por la tierra, las mujeres, las historias local y nacional, así como el amor hacia otro.

Generalmente hay grupos de mariachi en muchas plazas públicas; su origen viene de la Perla Tapatía pero su mayor éxito ha sido en la capital del país donde hay una plaza que le rinde homenaje: Plaza Garibaldi, donde diariamente hay grupos de mariachi dispuestos a complacer a los enamorados, grupos de amigos y las familias.

Actualmente es la música indispensable para reconocer a México, por esto y muchas razones más fue considerado Patrimonio Cultural Inmaterial en 2011 por la UNESCO.

Nuevo Complejo Carso

COMPLEJO CARSO

La megaconstrucción de Plaza Carso surge bajo la iniciativa del Ing. Carlos Slim y Ricardo Legorreta para desarrollar un proyecto totalmente sustentable, con la premisa de generar bienestar para la sociedad construyendo en un mismo lugar áreas culturales, comerciales, de entretenimiento y servicios varios.

La edificación de Plaza Carso inició formalmente en enero del 2008, contando con una extensión de terreno de 78,000m2, convirtiéndose después en 920,000m2 de construcción, destacando su compromiso social y sustentable al destinar vastos espacios a áreas verdes y zonas jardinadas.

Considerado el megadesarrollo de usos mixtos más grande de América Latina, Plaza Carso está constituida por; Torres Corporativas, Torres Residenciales, Centro Comercial y el circuito cultural más moderno, considerando el multipremiado Museo Soumaya, así como el Teatro Telcel, Museo Jumex y el Acuario Inbusa.

Bajo el lema de «convertir pasivos urbanos en activos sociales y económicos», el megadesarrollo ha contado con la participación y apoyo de autoridades gubernamentales como la Secretaría de Desarrollo y Vivienda del Gobierno del Distrito Federal, la Autoridad del Espacio Público, la delegación Miguel Hidalgo y diversos desarrolladores inmobiliarios para poner a la vanguardia a la antigua zona industrial de Polanco y convertirla en un centro-ciudad cosmopolita, donde el arte, los negocios y la calidad de vida sean los principales actores.

El Museo Soumaya y el Museo Jumex se localizan en Plaza Carso, en pleno corazón del Polanco más trendy, frente a frente dos gigantes del arte. Dos conceptos que contrastan y se complementan. Dos miradas al arte. Dos coleccionistas. Dos edificios que son, en sí mismos, piezas de museo.

Admira, antes de entrar, la brillante y complejísima cubierta de formas orgánicas del Museo Soumaya, ahora uno de los símbolos de la ciudad. El museo está diseñado por el innovador arquitecto mexicano Fernando Romero, con la colaboración de Frank Gehry. Dentro, Rodin, Diego Rivera y Miguel Ángel te dan la bienvenida. De hecho, el museo alberga la mayor colección de Rodin fuera de Francia. Distribuidas en cinco plantas temáticas, parte de la colección privada de arte de todo el mundo y todas las épocas, perteneciente a Carlos Slim.

Frente al arriesgado diseño del Museo Soumaya, voltea para contemplar la serenidad de cantera del Museo Jumex. Diseñado por David Chipperfield, el edificio en sí es otra auténtica joya. Pasea por sus salas altas y luminosas, en las plantas superiores inundadas de luz natural, con una muestra de probablemente la mayor colección de arte contemporáneo de Latinoamérica. Además encontrarás exposiciones temporales curadas con acuerdos entre grandes museos del mundo como el MoMA.

Mega Ofrenda Día de Muertos

Día de Muertos….y el alimento que sacia el alma

Está ya muy cerca el Día de Muertos y, en muchos sitios es una festividad muy importante. Hablar del Día de Muertos es, sinónimo de fiesta, tradicional, importante y reconocida a nivel mundial. Es recordar en vida y celebrar alegres a quienes ya están en otro plano; logrando que por medio de comida, bebidas y flores el que se conviva por un día, con nuestros seres queridos; los apapachemos con lo que más disfruta el mexicano… la comida.

Y es en México que teniendo tal diversidad de tradiciones gastronómicas y costumbres donde haremos un viaje que los llevará de la mano a recorrer sus estados, pueblos, mercados, sintiendo a través de la lectura sus hermosas tradiciones todo alrededor de la comida que en estas fechas, que es la principal unión con el más allá.

Para empezar el Día de Muertos en México es una celebración que data desde la época prehispánica, donde celebrar la muerte tenía que ir acompañada de majestuosas comidas y platillos dignos para esta celebración. Para nuestros ancestros, el alimento siempre fue un símbolo de no solo alimentar el cuerpo, si no también alimentar el alma y el espíritu. Es donde el Maíz, cacao, amaranto, calabazas, chiles, flores, pulque, semilla, entre muchos; eran los principales ingredientes a consumirse en esta gran celebración. Tiempo después y, al igual que con muchas otras tradiciones mexicanas ésta se catolizó en parte, lo que permitió enriquecerla aún más con la llegada de nuevos alimentos e ingredientes a nuestro altar. En estas fechas, parte de esta tradición es hacer los altares y ofrendas a nuestras animas; a quienes los dedicamos con tanto respeto y gusto. En estas ofrendas y dependiendo del Estado de la República es lo que se colocará de comida y bebida. Siempre serán platos llenos de comida, fruta, dulces, atole, y bebidas con alcohol o que al difunto le gustaba, los colores de frutas y platillos casi siempre van en los tonos naranjas, amarillos o rojos (mandarinas, tejocotes, mazorcas, naranjas, calabazas en dulce, moles, etc.), ya que se tiene la creencia de que estos, por sus tonos de color intenso guían a las almas hasta su altar.

La comida una vez puesta en el altar no debe ser tocada por nadie hasta el día siguiente o, hasta la hora que se decida que los muertos ya han comido lo suficiente. “Las bebidas sacian la sed del recorrido del alma”…y si le pusieron su alcoholito, aún mucho mejor para recordar sus buenos tiempos y festejar con sus seres vivos.

La comida es para todos el significado de unión en esta celebración, los tamales (con todas sus variantes), el pan tradicional que varía dependiendo el Estado, las calaveritas de amaranto y azúcar, los atoles, los moles tradicionales, los pibes, mucbipollos, el xec (mezcla de naranja, mandarina, jícama, chiles) la bebida Balché, atole Tan-chucua que está elaborado con maíz, cacao, pimienta y anís, los marquesotes, el Pozol blanco y de cacao, el Puxinu (palomitas con dulce) cocadas, tepaches, sotoles, mezcales, caldos y sopas, arroces y frijoles de olla…y por supuesto las tortillas hechas a mano y salidas del comal. La lista es enorme de todo lo que se prepara para este gran día.

“Si nos dan un día al año para regresar a casa; definitivamente, lo que más disfrutaríamos seria el comer todo aquello que disfrutamos en vida, acompañados de quienes nos aman y amamos y así volver a dormir otro año más con la panza feliz y el corazón contento”.

Nuevo Espectáculo de Luz y Sonido en Teotihuacán

TEOTIHUACAN…   Nuevo espectáculo de Luz y Sonido

Teotihuacán, «donde los hombres se convertían en dioses»

La ciudad prehispánica de Teotihuacan fue inscrita en la lista de Patrimonio Mundial por la UNESCO en el año de 1987 por ser la urbe más antigua de América, con esto se estableció el compromiso mundial de protegerla y conservarla. Se trata de un reconocimiento internacional que no sólo destaca su valor estético e histórico, sino la necesidad de la preservación y el cuidado de lo edificado por las antiquísimas culturas de la zona.

En su época de mayor esplendor incluso llegó a albergar a más de cien mil habitantes, quienes disfrutaban de un valle rico en recursos naturales, lo que hacía que se concentraran ahí los poderes político, económico, comercial, religioso y cultural.

Hoy en día Teotihuacan es reconocida como una de las pruebas más importantes del urbanismo antiguo y el desarrollo, por lo que es objeto de interés para propios y extraños, así como científicos y humanistas que buscan conocer la avanzada cultura de esa época.

Actualmente se compone de cuatros edificaciones principales: la Pirámide del Sol, la Pirámide de la Luna, el templo de Quetzalcóatl y la calle de Los Muertos que conecta todos estos puntos.

En el interior del complejo se encuentran los museos: Cultura Teotihuacana y Murales Teotihuacanos. Los vestigios arqueológicos de la antigua ciudad son visitados cada año por miles de personas, haciendo del sitio uno de los mayores polos de atracción turística del país, principalmente en marzo con el inicio de la Primavera, ya que se cree que la energía se renueva en la punta de la Pirámide del Sol.

Y ahora puedes disfrutar de Teotihuacán, experiencia Nocturna con Luz y Sonido,  te sorprenderás viendo la encantadora pirámide del Sol iluminada por una proyección multimedia, donde se mostrará la historia de este sitio arqueológico. Además, admirarás otros monumentos alumbrados, así como los relatos referentes a la famosa Calzada de los Muertos.