Potosí ciudad de tradiciones y leyendas se viste de fiesta una vez al año para celebrar la festividad de Ch’utillos dedicada a San Bartolomé. Religiosidad y paganismo se fusionan en esta prometedora actividad cargada de algarabía.

 Los turistas pueden disfrutar de esta festividad folclórica de Ch’utillos durante tres días cada año, viviendo una majestuosidad cultural expresada en danza, vestimenta, música, gastronomía y otras expresiones tradicionales de esa región andina de Bolivia.

La fiesta se celebra el 24 de Agosto, día de San Bartolomé y se extiende dos días mas con las entradas los días sábado y domingo siguientes, popularmente tiene tres nombres, correspondientes a tres días de celebración. El Primer día se conoce como Fiesta del Ch’utillo, el segundo como Fiesta del Majtillo y el tercero como Fiesta del Thapuquillo.

Ch’utillos congrega a todo el país

El folclore boliviano y potosino se hacen presentes en espectaculares grupos de danzarines que no contemplan su edad a la hora de participar en Ch’utillos. Además participantes de las 16 provincias del departamento presentan danzan autóctonas.

 La fiesta mayor se realiza el sábado, en la cual miles de bailarines, acompañados de bandas de músicas típicas, danzan al ritmo de caporales, morenadas, diabladas, tinkus y otras danzas, mostrando el folclore boliviano.

 En la entrada folclórica de Ch’utillos se exhibe fina platería y diversas artesanías potosinas, como también se hace gala de los famosos confites potosinos, comidas típicas y deliciosos helados artesanales, entre otras atracciones turísticas.

Si soñaste visitar un lugar único, el impresionante Salar de Uyuni es la opción correcta, más de 10 mil kilómetros cuadrados de sal te transportan a un mundo totalmente desconocido.

El Salar de Uyuni está ubicado en el Departamento de Potosí al suroeste de Bolivia, en la zona más baja del altiplano, cerca de los Andes, a una altura de 3650 metros sobre el nivel del mar.

El Salar de Uyuni es considerado el más grande del mundo. Es 25 veces más grande que el salar de Bonneville en los Estados Unidos de Norteamérica. Se estima que contiene 10 billones de toneladas de las cuales menos de 25.000 toneladas son extraídas anualmente.

Toda esta región se caracteriza por la presencia de geiseres, fumarolas, barros volcánicos, vertientes de aguas calientes y azufreras. El paisaje agresivo de la cordillera Occidental se ve matizado por la presencia de lagunas y valles enclavados entre las montañas.

Esta región semidesértica encierra en su interior recursos de gran importancia económica como la reserva de 9 millones de toneladas de litio y otros minerales; y paisajes de extraordinaria belleza natural.

  Laguna Verde y Colorada

El Salar de Uyuni es un destino turístico increíble, en su recorrido también se puede disfrutar de las Lagunas Colorada, Verde y las aguas termales, que forman parte de la Reserva Nacional Eduardo Avaroa.

La laguna Verde es una hermosa laguna con aguas de tonalidad verde ubicada hacia el límite con Chile y al pie del volcán Licancabur a una altura de 4.300 msnm (14.000 pies). Su coloración se debe a los sedimentos minerales de cobre. La laguna Colorada es una laguna con aguas de coloración carmín, también debida a la resencia de minerales en sus aguas. En estas lagunas viven flamencos creando una escena única de espectacular belleza!

Orígenes del Salar de Uyuni

Como hace 40.000 años atrás, un gigantesco lago prehistórico “Minchin» se secó y dejó dos lagos, Poopó y Uru Uru, y dos grandes desiertos salinos, Salar de Coipasa y el mayor Uyuni.

Cada noviembre, el Salar de Uyuni es escenario de cría para tres especies de flamencos sudamericanos – Chileno, James y Andino.

En medio de este mar de sal existe un oasis desértico. La Isla Pescado, llamada así por su forma de pescado, cubierta de gigantescos cactuses. Es la única señal de vida por kilómetros.

Imagina una laguna con agua agradable y cálida entre las los cerros, el Ojo del Inca. El agua termal emerge del centro de la tierra formando un circulo casi perfecto. Se dice que está sobre la cima de un cráter volcánico.

El Ojo del Inca, es una de las lagunas de aguas termales que tiene Potosí, las cuales poseen excelentes propiedades curativas, sobre todo para enfermedades como el reumatismo, artritis, dolores musculares y otros.

El Ojo del Inca está ubicado en la población de Tarapaya, a 26 kilómetros de la ciudad de Potosí, a una altitud mucho menor. En medio camino se puede hacer una parada para conocer la famosa cueva del diablo.

La laguna tiene 200 metros de diámetro y la temperatura de las aguas que brotan de su interior alcanzan una temperatura de 75 grados centígrados. Su forma de círculo casi perfecto le hace parecer a un ojo gigante.

De acuerdo a las leyendas del lugar, el líder  Inca Huayna Cápac solía bañarse en las tibias aguas de esta laguna para purificar su espíritu. De allí obtiene su nombre Ojo del Inca.

Como llegar hasta el Ojo del Inca

Se trata de un paraje turístico natural, con cálidas aguas para disfrutar y un paisaje original, que te invita a acampar. En caso de buscar un poco de confort, a pocos kilómetros del lugar se encuentra con el “Complejo Tarapaya”, que cuenta con piscinas olímpicas, baños y alimentos.

Para llegar hasta el Ojo del Inca se puede abordar vehículo público en el Mercado Chuquimia, por un precio de 5 bs, Una vez en el lugar debes pagar 10 bs para permanecer en el lugar.

Nadar en la orilla es la principal recomendación de los cuidadores al ingresar a las aguas termales Ojo del Inca, ya que para todos es desconocida la verdadera profundidad del centro de la laguna y en caso de no poseer habilidades de nado puede resultar peligroso.

El patrimonio arquitectónico de Potosí está representado por numerosas construcciones coloniales, libros de piedra que cuentan la historia tan solo con su presencia. Es el caso de la Catedral de Potosí.

La Catedral es la primera iglesia mayor de Potosí, está catalogada como una obra arquitectónica con estilo barroco virreinal e influencia neoclásica . Se alza en el centro de la ciudad, la plaza 10 de noviembre de Potosí.

Esta obra fue construida entre los anos 1808 a 1838, impulsada por Fray Manuel de Sanahuja y su construcción demandó 28 años.

El templo tuvo una nave de crucero que subsistió hasta principios de 1807, pero su desplome obligó a la reconstrucción de la Iglesia. Actualmente la Catedral muestra la piedra y el ladrillo con que fue originalmente construida, cuenta con una cúpula centra y dos torres.

En 1924 obtuvo el rango de Catedral y actualmente es considerada como una de las más bellas de Latinoamérica. En su interior hay importantes reliquias religiosas de oro y plata.

Más allá de la Catedral

Otro de los símbolos de la ciudad es la Torre de la Compañía de Jesús, un convento religioso en el centro de la ciudad de Potosí. Es uno de los muchos ejemplos de arquitectura religiosa mestiza de Potosí.

Fue construido en el siglo XVIII, refleja el máximo esplendor de Potosí, su edificación se concibió como un arco del triunfo con cinco aberturas, treinta y dos columnas salomónicas y tres cúpulas de media naranja. Es una ostensible expresión de la espiritualidad de la época.

En la Iglesia de San Francisco, al igual que en la de Iglesia de San Lorenzo, se pueden observar una gran exposición artística en su interior, con la inclusión de deidades indígenas y símbolos del Cristianismo.

La Capilla del Sagrado Corazón es otra de las atracciones turísticas de Potosí, mezcla de religión y mística. El pequeño templo se yergue encima de Cerro Chico y la parte superior la estatua de un Cristo protege la ciudad.

Como su nombre lo dice, la Casa de la Moneda fue en otrora la fábrica de monedas de la Corona Española, en su interior el mineral se hacia dinero, en dimensiones gigantescas que marcaron la época de la colonia.

Cálculos aproximados han determinado que durante la colonia el centro minero aportó a la corona española el equivalente a 50.000 millones de dólares, una cantidad superior a todo el caudal metálico circulando en Europa.

En la Casa de la Moneda, los turistas pueden apreciar las máquinas que se utilizaban para acuñar monedas; entre estas los cuños, hornos, troqueles y las maquinarias de laminación, que llevan tres conjuntos de engranajes traídos desde España.

Si se guarda silencio casi se puede escuchar el ruido de las maquinas, el esfuerzo de los hombres que las manejaban y el sonido de las monedas al caer una tras otra, en realidad es más que un recorrido, es volver en el pasado.

La Casa de la Moneda hoy es un museo

La Casa de la Moneda fue construida entre 1757 y 1773, es reconocida como monumento nacional. En la actualidad este repositorio cultural se ha convertido en un centro museológico y documental muy conocido a nivel nacional e internacional.

En el recorrido por la Casa de la Moneda, los turistas tienen la oportunidad de apreciar colecciones únicas, como pintura, platería, textiles, arqueología, armas, esculturas, retablos, filatura, muebles, maquinas de escribir, etnografía y folclore y arte moderno.

Los visitantes de la Casa de la Moneda son recibidos por un singular personaje, reflejado en un mascarón con la sonrisa burlesca, los cachetes semi inflados y una corona de uvas. No existe una versión definitiva sobre lo que representa.

El tour suele durar de una hora a dos horas, el precio puede fluctuar entre 10Bs a 20Bs. La visita es guiada y puede ser en español, inglés, francés, o italiano. Lo más recomendable es tomar las primeras guías de la mañana y de la tarde ya que las últimas son apresuradas y resumidas.

 El Cerro Rico de Potosí, es conocido en quechua como Sumaj Orko que significa “Cerro Hermoso”. Se trata de una montaña de la Cordillera Central de los Andes ubicada en la ciudad de Potosí.

Se alza imponente a las faldas de la ciudad, como mudo testigo de un pasado colonial marcado de sacrificio y riqueza. Su inmensidad y grandeza lo convierten en un atractivo turístico singular.

El Cerro Rico es parte de la historia de América porque en época de la colonia española tenía las vetas de plata más importantes del mundo. Tiene una altitud aproximada de unos 4800 metros sobre el nivel del mar.

Visitar el Cerro Rico es toda una aventura, para ingresar a la mayor mina de su interior “Pailaviri” se deben descender 240 metros de profundidad en un elevador que baja de tres en tres metros.

Al descender 70 metros de altura bajo la tierra, el primer encuentro del Cerro Rico es con el demonio, conocido como el “Tio”, a quien se le hacen ofrendas para poder sacar el metal de sus entrañas.

La temperatura en el interior de la mina puede variar unos 45º C entre el exterior y los niveles más bajos. Dentro se pueden apreciar galerías de extracción de todos los minerales como: el plomo, plata, zinc y estaño.

El tio del Cerro Rico

La historia indica que el inca Huayna Capac quiso explotar las minas del Cerro Rico, conocido también como Sumaj Orcko. Después de ejecutar una serie de explosiones en el interior de las minas, los vasallos escucharon una voz que decía: «No saquen la plata de este cerro, porque será para otros hombres».

Ese acontecimiento sobrenatural les infringió de miedo por lo que decidieron alejarse de ahí pronunciando la palabra Ppotocci (explosión). En ese marco, es probable que el origen de la palabra Potosí provenga de esta palabra quechua.

Luego en 1545, el indio Diego Huallpa cuando estaba por el lugar prendió una fogata con pajas para protegerse del frio, descubrió los hilos blanquecinos y puros de la plata, mineral que sólo podía ser observado si se sometía al fuego.

A raíz de este descubrimiento, el capitán Juan de Villarroel , conjuntamente con Diego de Centeno, Pedro Cotamito y Luis de Santander procedieron a fundar en las mismas faldas del cerro la Villa Imperial de Carlos V, hoy conocida como Potosí.