Cataratas Nauyaca

Cataratas de Nauyaca

Debido a su extraordinaria belleza natural y a las muchas actividades que pueden realizar los turistas, Las Cataratas de Nauyaca, son una de las principales atracciones de Costa Rica. Se encuentran a 10 km de Dominical en el camino hacia San Isidro de El General en un cañón de 80 metros de ancho.  La palabra Nauyaca viene de la lengua Nauhualt y representa a una serpiente venenosa de labio hendido que habita en la región de Mesoamérica. También son conocidas como cataratas de Santo Cristo.

Cataratas de Nauyaca
Cataratas de Nauyaca

La atracción está compuesta por dos cascadas, una de cuarenta y cinco metros de altura en caída libre y la otra, a veinte metros de altura con una caída escalonada, formando en la parte inferior una poza de 1.000 metros cuadrados, y seis metros de profundidad. También hay  piscinas naturales más pequeñas donde los visitantes pueden aprovechar la oportunidad y disfrutar de las aguas con sus familiares o amigos.

Este es el lugar ideal para los amantes de la naturaleza y la aventura, donde los turistas pueden caminar, nadar, escalar, saltar, tomar fotografías y pasar un día maravilloso en las aguas cálidas del Río Barucito, disfrutando de uno de los lugares más bellos en el Pacífico Sur de Costa Rica .

Estas cascadas son un punto de referencia para el ecoturismo de aventura, ya que son reconocidos en todo el mundo por su belleza y los excelentes servicios que ofrece.  Existen tours a caballo, que incluyen merienda y guías turísticos para disfrutar de todo el ecosistema. La expedición dura medio dia y es de moderada actividad física ya que parte del recorrido debe hacerse caminando, se recomienda llevar protector solar, repelente y traje de baño para disfrutar de las pozas naturales.  Se deben hacer reservaciones previas en los hoteles de la zona o como tour operadores locales.

Cómo llegar

Isla del Caño

Isla del Caño

Isla del Caño es una pequeña isla a unos 20 km de Bahía Drake, Costa Rica, que posee unas 300 hectáreas (3 km²). Está en la parte del Océano Pacífico de Costa Rica, al oeste de la Península de Osa. Fue declarado como parque nacional y área protegida, con una estación permanente de guardaparques en la isla. Es un popular destino turístico, que atrae a los visitantes por sus playas, bancos de coral y vida marina.

isla del caño
Vista aérea Isla del Caño

La isla está rodeado por cinco plataformas de arrecifes de coral. Áreas para camping han sido establecidas cerca de la estación de los guarda parques, donde también se puede encontrar agua potable.

La isla está a 110 metros sobre el nivel del mar, es compuesta principalmente de playas de arena blanca, algunas de las cuales desaparecen durante la marea alta.

La mayor atracción de la isla yace debajo de la misma. Los expertos han calificado esta locación como una de las mejores en el mundo para el buceo y es considerado como un lugar nuevo y diferente para explorar, con paredes desde 15 y 16 pies hasta 80 pies de profundidad.

Las formaciones de roca volcánica proporcionan las bases para las colonias de coral, que a su vez dan hogar a pequeños moluscos, crustáceos y un sin fin de peces increíble, pero por su estatus de reserva biológica el buceo en esta zona es regulado.

Solo se permite 10 buceadores como máximo, en cinco sitios abiertos al público. Por ley está totalmente prohibido el movimiento de cualquier objeto marino, vivo o muerto (ej, conchas, corales).  Aunque las corrientes y la visibilidad son difíciles de predecir, por lo general las condiciones son excelentes.

El nombre del juego aquí es TIBURÓN!, de seis a diez pies de otros escualos.

Buceo en la Isla del Caño

Esferas de piedra

Esferas de Piedra Precolombinas

Las esferas de piedra de Costa Rica son un grupo de más de quinientas petroesferas precolombinas ubicadas principalmente en el sur de Costa Rica, en la llanura aluvial del delta del río Diquís (confluencia del río Sierpe y el río Grande de Térraba), en la península de Osa y en la Isla del Caño. La zona pertenece al distrito de Sierpe, en el cantón de Osa.

Como conjunto, las esferas se consideran únicas en el mundo por su número, tamaño, perfección, formación de esquemas organizados y abstracción ajena a modelos naturales. Su gran valor radica en que se hicieron bajo condiciones tecnológicas y sociales consideradas muy difíciles en la actualidad. No obstante, las sociedades indígenas que las esculpieron lo hicieron casi de forma perfecta, con acabados muy finos en muchos casos.

Las dimensiones de las esferas oscilan en un rango de los 10 centímetros hasta los 2,57 metros de diámetro y su peso llega a superar las 16 toneladas. La mayoría están hechas en piedras duras como granodiorita, gabros y algunas pocas en caliza. Los arqueólogos a través de la estratigrafía de su emplazamiento y de otros objetos encontrados en su cercanía, estiman que las piedras fueron ubicadas por los indígenas de la zona entre el 300 a. C. y el 300 d. C., pero el trabajo escultórico aún no ha podido ser datado científicamente.

Las esferas se produjeron y utilizaron durante un periodo que va del 400-500 d.C hasta la conquista española, en un lapso cercano a los 1000 años.

En la actualidad, las esferas de piedra se consideran como la manifestación artística por excelencia de la escultura precolombina costarricense. En 2014, la Unesco eligió el conjunto de asentamientos cacicales precolombinos con esferas de piedra de Diquís como Patrimonio de la Humanidad. El 16 de julio de 2014, la Asamblea Legislativa de Costa Rica las declaró símbolo nacional del país.

Descubrimiento

Las esferas de piedra fueron descubiertas en 1939, cuando la compañía bananera estadounidense United Fruit Company empezó a deforestar aquellos territorios para cultivar banano. Desde entonces se consideraron como un misterio y los estadounidenses dinamitaron algunas de ellas, por la creencia de que en su interior podría haber oro.

La primera mención internacional fue un pequeño artículo arqueológico de Doris Stone publicado en 1943 en la revista American Antiquity, atrayendo la atención de Samuel Kirkland Lothrop (del Peabody Museum y la Universidad de Harvard), quien en 1948 estaba en Costa Rica. Contactó en San José con Doris Stone, quien le aportó información y contactos para investigar en zona más conocida donde estaban apareciendo las esferas de piedra. Por fin, Lothrop publicó sus investigaciones en su libro Archaeology of the Diquís Delta. Costa Rica, 1963.

Desde 1970, las autoridades del Gobierno protegen las esferas de piedra precolombinas y sus emplazamientos. Algunas de las dinamitadas se han reensamblado bajo el cuidado del Museo Nacional el cual, con el apoyo de la ley, está recuperando otras que particulares han trasladado a empresas, residencias e instituciones públicas.

Parque Marino Ballena

Parque Nacional Marino Ballena

Este parque nacional está localizado en el Pacifico Sur de Costa Rica en medio de las desembocaduras del Río Morete y Piñuelas. Es el primer parque marino que se creó en Costa Rica, cuyo objetivo principal es la protección de los ecosistemas tanto  marinos como terrestres. Posee una extensión de 110 hectáreas terrestres y 5,375 hectáreas marinas.

El parque es reconocido por la visita de las ballenas jorobadas durante dos ocasiones al año las cuales vienen a parir a sus crías y a reproducirse. Además de las ballenas jorobadas es posible ver delfines nariz de botella, delfines manchados, tortugas, tiburón ballena, mantarayas y gran variedad de peces alrededor de las 18 especies de coral presentes en el parque. Sin dejar de lado a los amantes de las aves, ya que se pueden observar en las orillas de la playa, ibis, zarapitos, pelicanos, en la cercanía de los islotes se logran apreciar; piqueros moreno, fragatas, ostreros americanos etc.

Atractivo

La Cola de la Ballena, es una formación natural rocosa y arenosa formada por sedimentación arrastrada por las  mareas provenientes de la desembocadura de los ríos Morete al norte y el río Madrigal al suroeste.

La cola de ballena sólo se puede visitar durante la marea baja ya que en marea alta queda cubierta bajo el agua.  La formación completa puede ser vista desde partes altas o haciendo un sobrevuelo sobre la zona. Las mareas son cambiantes, todos los días son a diferentes horas por lo que se recomienda tener en cuenta la hora de marea baja para poder ingresar.